Me gustaría ilustrar este pensamiento en la primera sesión del Taller —que durará una hora y treinta minutos—, compartiendo una serie de hechos casuales que describo en la novela y que han tenido un gran impacto en las tres esferas que he señalado: a nivel individual, a nivel nacional y a nivel mundial. Y me gustaría también apartar unos veinte o treinta minutos de este primer encuentro para cualquier pregunta que pueda surgir entre los asistentes.

En la segunda sesión —que también durará una hora y treinta minutos—, quisiera explorar la forma en que el azar o la casualidad pueden servir como ingredientes o elementos narrativos; la manera que lo inesperado y fortuito contribuyen al plan original del relato, y conducir la trama hacia el desenlace que desea o necesita quien narra la historia. Al final, quisiera emplear los últimos treinta minutos para que los asistentes compartan cuáles han sido esos hechos pequeños y casuales que les ha marcado la vida. Puede ser el acontecimiento de apariencia menor, fruto del azar, que le salvó la vida, que le permitió conocer a su pareja, que le facilitó o impidió obtener el trabajo de sus sueños, etc. Esta parte de la sesión sería un diálogo colectivo, y creo que servirá para que cada persona tome conciencia de la fragilidad de nuestra existencia, y más al entender que, si tal suceso hubiera ocurrido un segundo antes o uno después, o si hubiera tomado lugar un milímetro más allá o un milímetro más acá, la totalidad de su existencia habría sido otra.

Espero que podamos investigar este tema tan apasionante, y a la vez espero que sea de interés para todos los participantes.